The following text field will produce suggestions that follow it as you type.

Barnes and Noble

Loading Inventory...
Una Habitación con Vistas

Una Habitación con Vistas in Bloomington, MN

Current price: $19.00
Get it at Barnes and Noble
Una Habitación con Vistas

Una Habitación con Vistas in Bloomington, MN

Current price: $19.00
Loading Inventory...

Size: Paperback

Get it at Barnes and Noble
-La Signora no tiene derecho a hacer esto -dijo la señorita Bartlett-, ningún derecho. Nos prometió habitaciones al sur con una panorámica conjunta; en su lugar, aquí tenemos habitaciones al lado norte y dan a un patio y bien alejadas. ¡Oh, Lucy! -¡Y además es una cockney! -dijo Lucy, que se había entristecido por el inesperado acento de la Signora-. Se diría que estamos en Londres. Miró las dos hileras de ingleses sentados junto a la mesa; la hilera de botellas blancas de agua y rojas de vino que corrían entre sus manos; los retratos de la última reina y del último poeta laureado que colgaban detrás de los británicos, pesadamente vestidos; el cartel de la Iglesia anglicana (reverendo Cuthbert Eager, M. A. Oxon), que constituían la única decoración de la pared. -Charlotte, ¿no sientes también tú que bien podríamos encontrarnos en Londres? A duras penas puedo creer que todo este tipo de cosas distintas estén precisamente fuera. Supongo que se debe a que una se siente tan cansada.
-La Signora no tiene derecho a hacer esto -dijo la señorita Bartlett-, ningún derecho. Nos prometió habitaciones al sur con una panorámica conjunta; en su lugar, aquí tenemos habitaciones al lado norte y dan a un patio y bien alejadas. ¡Oh, Lucy! -¡Y además es una cockney! -dijo Lucy, que se había entristecido por el inesperado acento de la Signora-. Se diría que estamos en Londres. Miró las dos hileras de ingleses sentados junto a la mesa; la hilera de botellas blancas de agua y rojas de vino que corrían entre sus manos; los retratos de la última reina y del último poeta laureado que colgaban detrás de los británicos, pesadamente vestidos; el cartel de la Iglesia anglicana (reverendo Cuthbert Eager, M. A. Oxon), que constituían la única decoración de la pared. -Charlotte, ¿no sientes también tú que bien podríamos encontrarnos en Londres? A duras penas puedo creer que todo este tipo de cosas distintas estén precisamente fuera. Supongo que se debe a que una se siente tan cansada.
Powered by Adeptmind