Una mujer joven que se va a vivir al campo...
Una artista controvertida...
Unos trabajadores insatisfechos...
Son algunas de las historias que aparecen en estos relatos; ventanas por las que asomarse a un mundo ignorado, y en las que a su vez nos vemos reflejados.
Un buen libro para quienes no han anulado su empatía hacia los animales y han tomado decisiones transformadoras al respecto. Y un buen libro también para los demás, para fomentar su compresión del veganismo y que quizá, quién sabe, siembre el deseo de acercarse a este movimiento.